sábado, 28 de agosto de 2010

LOS TIPOS DE HOMBRE

Los tipos de hombre:El estudio de la estructura de la Personalidad permite abordar un problema
que cumple un importante rol en la ciencia esotérica: el problema de los tipos
humanos. Si es exacto que cada hombre representa de alguna manera un
universo aparte, no es menos cierto que los tipos humanos se repiten. Se repiten a
menudo, mucho más a menudo de lo que se cree comunmente; en realidad, no
son muchos. En total no existen más que tres tipos fundamentales. Estos tipos
se distinguen por la preponderancia de tal o cual de los tres centros psíquicos
en la Personalidad: el hombre sobre todo intelectual, que piensa, calcula,
busca; el hombre emocional por excelencia, sentimental, artista, romántico; por
ultimo, el hombre de acción. En la Doctrina se los llama así:

hombre 1 es aquel en quien el centro de
gravedad psíquico reside en
centro motor;
hombre 2 es aquel en quien el centro de
gravedad psíquico reside en el
centro emocional;
hombre 3 es aquel en quien el centro de
gravedad psíquico reside en el
centro intelectual.

El hombre, tal como nace de la mujer, pertenece obligatoriamente a uno de
los tres tipos fundamentales en los cuales está comprendida toda la humanidad,
sea cual fuere la raza, la casta o la clase. Se trata de una ley de la Naturaleza y
no le es dado al hombre sustraerse a ellas pasando de un tipo a otro según su
conveniencia.
Veremos sin embargo que existen otros tipos, superiores a los tres tipos
fundamentales, pero —salvo casos totalmente excepcionales— no se pertenece
a esos tipos superiores por derecho de nacimiento. La creación de los tipos
superiores es el resultado de un largo proceso de gestación al cual hacia alusión
Jesús cuando, hablando a Nicodemo, le decía que el hombre debe nacer de
nuevo. Para elevarse a esos niveles es necesario realizar esfuerzos conscientes
y sostenidos de acuerdo a las reglas instituidas
desde milenios por la ciencia
esotérica.
Cuando, habiendo tomado cuerpo, el centro magnético establece una autoridad
incuestionable sobre los tres centros de la Personalidad, el hombre hasta ese momento 1, 2 o 3, se transforma en hombre 4. A lo largo de esta etapa de su
evolución su tarea consistirá en reconocer el modo de funcionamiento de los
tres centros psíquicos, asignar a cada uno de ellos el rol que le es propio y
equilibrarlos. Así se perfecciona el crecimiento del centro magnético y comienza
su desarrollo. Este es función de los esfuerzos conscientes producidos para
desarrollar hasta el límite los centros inferiores. A medida que avanza este
desarrollo
el centro magnético absorbe al centro emotivo
inferior y de ésta forma se transforma
en Hombre 5
al tiempo que
se identifica más y más al centro emotivo superior. Cuando los tres centros
inferiores están plenamente desarrollados y equilibrados, el centro magnético se
identifica definitivamente al centro emotivo superior, arrastrando consigo —y
absorbiendo al mismo tiempo— al centro emotivo inferior. De ahí en adelante,
el centro emotivo inferior y el centro magnético serán parte integrante del centro
emotivo superior.
Realizada esta unión, quien continua el trabajo sobre si mismo llegara a ser
hombre 5.
Opuestamente a los hombres 1, 2 o 3, llamados hombres exteriores, los
hombres 5, 6 y 7 son hombres interiores.'
Al establecer un lazo entre el centro
emotivo superior
y el centro intelectual
superior, el hombre se transforma
en hombre 6.
Después de eso le quedaran por
consolidar los resultados obtenidos. Esta consolidación constituye la ultima
etapa de la evolución esotérica.
Las tareas en las diferentes etapas de la evolución pueden ser definidas
como sigue:


—hombre 4 —reconocer la existencia de los tres centros inferiores, hacerlos
crecer, desarrollarlos hasta el límite y regular su funcionamiento;
—hombre 5 —adquirir nuevas facultades: poderes;
—hombre 6 -desarrollar hasta el límite las facultades asi adquiridas;
—hombre 7 —consolidar los resultados obtenidos



Esta consolidación se obtiene mediante la sublimación del sexo.
Al considerar el esquema completo del hombre (fig. 24) debe tenerse
presente en la mente, sobreentendido, el mismo esquema bajo un ángulo un
8.Romanos, VII, 22.
9.Son los dones del Espíritu Santo - I Corintios, XII, XIV.
En tanto que los hombres 1, 2 o 3 —movidos por la energía del centro sexual
expandida a través de los tres centros— utilizan el Yo provisorio de la
Personalidad. Yo inestable, cambiante, ilógico consigo mismo y que implica una
existencia fáctica, la situación cambia por completo cuando, franqueada la
etapa del hombre4, el buscador llega a ser hombre interior 5, luego 6 y por ultimo
7:
—llegado a hombre 5, accede de manera permanente a
la conciencia de su Yo real
—llegado a hombre 6, accede en permanencia a la Conciencia
10. 1 Corintios, XV, 51.
—llegado a hombre 7, accede a la libertad, obteniendo
una verdadera Voluntad
Yo - Conciencia - Voluntad constituyen el triple objetivo de la ciencia esotérica
y son la recompensa a los
Con esfuerzos realizados conscientemente y
perseverancial el hombre 7, obtiene
una verdadera Voluntad.
. Aquí toca a su fin la evolución esotérica posible en las condiciones
de la humanidad terrestre.

Boris Mourariev, Gnosis.


http://eneagramacuartocamino.wordpress.com

domingo, 15 de agosto de 2010